La entrada sobre el satélite Telstar publicada hace algunos días, terminaba diciendo que al mismo se le llegó a dedicar una canción. Se trataba de un tema del grupo británico The Tornados, y se convirtió en el primer tema de un grupo inglés que alcanzaba el número 1 en las listas de éxitos de los Estados Unidos, allá por 1962.
La canción Telstar se caracteriza por su sonido eléctrico, obtenido gracias a un instrumento llamado clavioline, el cual incorporaba un teclado con controles y un amplificador, y por sus efectos de sonido que trataban de acercar al oyente a un ambiente espacial. Aunque se creía que éstos eran el resultado de enviar y recibir señales del Telstar, la realidad es que se obtuvieron rayando el borde de un cenicero con un bolígrafo, o reproduciendo una cinta de cassette en modo reverse que contenía la grabación de una cisterna de retrete.
Este tema se hizo realmente famoso, a pesar de que su productor, Joe Meek, recibió alguna denuncia por plagio. Se han realizado decenas de versiones de la canción, se ha convertido en el himno de dos equipos de fútbol americano, y hasta Margaret Tatcher la incluyó entre sus favoritas.
¿Cómo puede la ascendencia de Marte en el momento de mi nacimiento influir sobre mí, ni entonces, ni ahora? Yo nací en una habitación cerrada; la luz de Marte no podía entrar. La única influencia de Marte que podía afectarme era su gravitación. Sin embargo, la influencia gravitatoria del tocólogo era mucho mayor que la influencia gravitatoria de Marte. Marte tiene mayor masa, pero el tocólogo estaba mucho más cerca."
Carl Sagan en La armonía de los mundos.
03 septiembre 2009
Cantándole al balón de telecomunicaciones
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